Por René Sánchez
Garbiñe Muguruza y Sofia Kenin disputarán la inesperada final femenil del Abierto de Australia.
Nadie imaginó al arranque del torneo que estos dos nombres aparecerían ni siquiera entre las mejores ocho, pero tanto la hispano-venezolana como la estadounidense han hecho un gran torneo confirmándolo en las semifinales donde sus víctimas fueron la rumana Simona Halep (7-6 y 7-5) así como la australiana y número uno WTA Ashleigh Barty (7-6 y 7-5 también) respectivamente.
La caraqueña que estrenó coach (Conchita Martínez) y equipo de trabajo en Melbourne ha ido creciendo en confianza y en manejo de la presión, un aspecto que en el pasado la hizo sufrir mucho y pensar incluso en un retiro prematuro, pero Garbi ha vuelto a jugar con alegría, con mayor movilidad y eficacia desde el fondo de la cancha, más fuerte física y mentalmente convirtiéndose en la gran favorita al título de un Grand Slam que no ha ganado todavía pues sus anteriores triunfos Major fueron en Roland Garros y en Wimbledon, este último hace ya dos años y medio.
Muguruza será apenas la tercer tenista de nacionalidad española (aunque nació en Venezuela) que disputará una final en Australia después de Arantxa Sánchez Vicario en 1994 y 95) y de Conchita Martínez (su actual entrenadora) en 1998, pero ninguna de las dos la pudo ganar.
Además al arrancar el torneo Garbiñe era la No.32 del ranking y con este triunfo ya aseguró el 16o, pero si es campeona terminará en el lugar 12.
Por su parte Sofia Kenin, de 21 años y decimoquinta de la clasificación, será la primera finalista estadounidense en Melbourne desde que hace tres años las hermanas Williams (Venus y Serena) disputarán el título ganado por la menor, aunque en realidad y por una casualidad familiar Sofía Kenin nació realmente en Moscú.
La final femenil del primer Major del 2020 será el próximo sábado.
