Por primera vez en 28 años de existencia del Torneo de Halle solamente un tenista sembrado o preclasificado llegó hasta los cuartos de final y ese es Andrey Rublev.
El ruso de 23 años ya se instaló además en las semifinales del evento categoría ATP 500 derrotando por 7-6 y 6-2 al alemán de 37, Philipp Kohlschreiber, quien por cierto fue monarca de este evento en la edición del 2011, hace ya una década.
Rublev, que inició como el cuarto sembrado es ahora el máximo favorito al título por su calidad y prestigio y porque además el ruso tiene cuentas pendientes con si mismo tras quedar fuera con pésimas actuaciones en los torneo de Barcelona y de Roma.
Por el boleto a la gran final Rublev enfrentará a Nikolosz Basilashvili de Georgia, mientras que en la otra semifinal estará el verdugo de Roger Federer, el canadiense Felix Auger-Aliassime ante Ugo Humbert de Francia.
Rublev ocupa actualmente el escalón número siete de la clasificación mundial ATP, pero ha perdido un poco de confianza en el año y necesita conquistar la corona de Halle para llegar motivado al tercer Grand Slam del año, en Wim